A estas alturas, todo el mundo sabe quién es Deadpool. ¡Y quien no lo sepa, que abandone la sala automáticamente!
A pesar de contar con una cantidad ingente de fans lectores, su popularidad se vio propulsada estratosféricamente con la representación del personaje que hizo Ryan Reynolds en la primera película del Mercenario Bocazas, Deadpool (2016), dirigida por Tim Miller.
Nunca le estaremos suficientemente agradecidos al marido de Blake Lively y antiguo miembro del Cuerpo de los Linternas Verdes (¿alguien se acuerda?) el haber luchado durante tantos años por conseguir llevar adelante una propuesta seria y respetuosa con el personaje, después de aquella barrabasada que le hicieron en la infame X-Men Origins: Wolverine (2009).
Gracias a él, el Wade Wilson más macarra, salvaje e irreverente se ha convertido, a base de tacos, palabras malsonantes y sangre por doquier en todo un icono de la cultura pop y en el antihéroe preferido del público.
En este artículo te vamos a contar algunas cosas que probablemente YA sabes sobre el personaje (¡pero léetelas igualmente, prometemos hacerlo mejor y más divertido!) y otras muchas que esperemos que no, porque hemos rebuscado en las cloacas más profundas de la psique de nuestro mercenario favorito para que te sorprendan tanto que te provoquen una hemorragia cerebral... ¡o nos mandes a freír espárragos!
Que empiece la fiesta... ¡Chimichangas!
Creación, historia, poderes, bla, bla, bla... todo ese rollo
Vayamos al grano. Deadpool fue una creación de Fabian Nicieza y Rob Liefeld que hizo su debut en The New Mutants #98 (1991), dos números antes de que la colección cerrase y se reconvirtiese en X-Force, ya con un Liefeld pre-Image totalmente desatado y con los antiguos pupilos de la escuela de Xavier "mutados" en aguerridos héroes sin escrúpulos. ¡Los años 90 en todo su esplendor, damas y caballeros!
Y Deadpool es, sin lugar a dudas, hijo de los 90, como Venom (aunque las pelis de Wade son mejores), Cable, Domino y otros muchos otros que, con mejor o peor suerte, han llegado hasta la época actual adaptando su personalidad y actitud a lo largo de su trayectoria.
Porque, básicamente, todo se trataba de eso, de ACTITUD. Pistolones, cuchillos, hombreras gigantes, armas megaexageradas, posturas aún más megaexageradas (y anatómicamente imposibles), chaquetas cuero, frases lapidarias y actitud badass que de tan acentuada resultaba artificial.
¿Qué #$&%! hacía a Deadpool diferente al resto? En su primera aparición, el personaje era presentado como un villano, un mercenario sin escrúpulos contratado para asesinar a Cable. Sin embargo, no sería hasta años más tarde que se convertiría en el Deadpool chistoso que conocemos ahora, con constantes rupturas de la cuarta pared y una constante tendencia al lado más cachondo de las cosas.
Origen, motivaciones y demás cháchara...
Wade Winston Wilson (suponiendo que sea realmente su nombre) tiene un pasado bastante oscuro y misterioso (incluso para él mismo), debido a problemas mentales que supuestamente aparecieron ya desde su infancia, condicionada por problemas familiares, abusos y tragedias. Nacido en Canadá, pasó la mayor parte de su adolescencia en los Estados Unidos, dedicándose a la mala vida y haciendo lo necesario para sobrevivir. Esto le llevó a convertirse en mercenario, entrenándose físicamente y en el manejo de armas, para ofrecerse en misiones que él consideraba "justas", es decir, donde la víctima "mereciera" morir.
Después de ser diagnosticado de cáncer, se presenta como voluntario al Programa Weapon X (el mismo que creó a Wolverine). El experimento al que se sometió le otorgó un factor curativo igual al de Logan, lo que paralizaría el avance del cáncer que le consumía, pero le deja secuelas importantes, como un cuerpo desfigurado y un (aún mayor) desequilibrio psicológico y emocional.
Después de un par de miniseries bastante interesantes (y exitosas), el viejo Wade tuvo la inmensa suerte de contar con un equipo de lujo para su primera serie en solitario. El primer volumen de Deadpool (1997-2002) debutaría en las manos de Joe Kelly y Ed McGuinness, que ofrecieron una versión del personaje que continúa siendo hasta ahora la más recordada y añorada.
Kelly puso un gran énfasis en definir la tormentosa, contradictoria y enfermiza mentalidad del mercenario, planteando toda su etapa sobre la cuestión de la redención: ¿puede Deadpool convertirse realmente en un héroe, o al menos en algo parecido? Tal vez después de todo lo que ha sufrido ya no queda esperanza para él...
Poderes y habilidades...¡pero no te creas que lo sabes todo, que seguro que alguno ni te sonaba!
Factor curativo
Poderes, lo que se dice poderes...Hombre, Wade está entrenado en combate cuerpo a cuerpo (como ese otro supersoldado que ya sabemos) y se las apaña bastante bien, sobre todo porque aguanta lo que le echen gracias a un factor curativo que le permite recuperarse de cualquier paliza, desmembramiento y perrería que puedan hacer con su cuerpo: extremidades arrancadas, agujeros, perforaciones, quemaduras... ¡hasta con la cabeza separada de su cuerpo este hombre es capaz de continuar soltando salvajadas por su boca!
Cambio de imagen
Pero Wade tiene muchos trucos bajo la manga. Debido a tener el aspecto de un "testículo andante" (palabras suyas), cuando no está en una de sus misiones (con máscara), utiliza un inductor de imágenes holográficas, lo que le permite camuflarse bajo diferentes identidades para hacer de las suyas libremente.
Tecnología de teletransporte
Cuando no vuelas ni tienes supervelocidad sólo tienes dos opciones si quieres llegar rápidamente a algún lugar para liquidar a alguien: coger un taxi o teletransportarte. En los cómics, Wade ha sido inteligente y se ha decantado por o último, habiendo hecho uso de diferente tecnología para llegar al lugar adecuado en el momento menos oportuno.
Menos fuerte que Hulk, pero más que tú y que yo
Pero no sólo de trucos vive el Hombre. La base de datos de Marvel recoge que Deadpool tiene fuerza sobrehumana, pudiendo levantar hasta más de 2000 kilos, aunque no le hayamos visto hacer mucho uso de ella. A pesar de poder regenerarse en el peor de los casos, no podría haber hecho frente a oponentes tan poderosos tan sólo con ese cuerpazo...
Cabecita loca
Pero lo que le proporciona más ventajas y se convierte en su auténtico superpoder es nada más y nada menos que su inestabilidad mental. Podemos afirmar que su locura es peligrosa para quien se quiera entrometer en su mente, lo que le hace inmune a ataques psíquicos y a las triquiñuelas de cualquier telépata. La cabecita de Wade no es precisamente un lugar agradable para visitar...
Puro vicio
Por último, pero no menos importante, la capacidad regenerativa de Deadpool, además de parar su cáncer y evitarle pasar a mejor vida cada dos por tres, le ofrece dos ventajas por las que cualquier simple mortal (entre los que me incluyo) mataría: ¡poder comer todo lo quiera sin engordar ni un sólo gramo y beber hasta la extenuación sin emborracharse! ¿Para qué quieres volar, lanzar rayos o subirte por las paredes cuando te puedes dar la vida padre sin que te pase factura?
Trayectoria extremadamente resumida (si eres de l@s que lo quiere saber todo, vete a la Wikipedia)
Después de su debut en las páginas de The New Mutants y antes de disfrutar de su serie en solitario, Deadpool protagonizó dos miniseries. La primera fue Deadpool: The Circle Chase (1993), obra de Fabian Nicieza y Joe Madureira, que supuso un punto de inflexión para el personaje. Mientras que en sus primeras apariciones se muestra como alguien cruel y sin remordimientos, en esta historia un escáner cerebral forzado hace que Wade reviva todos los traumáticos experimentos sufridos en el pasado y, tras el sacrificio de su antiguo amor (una Vanessa transformada en villana, muy diferente a la de las películas), tiene una epifanía, avergonzándose de no haberse cuestionado nunca la persona en la que se ha convertido.
En su segunda miniserie, Deadpool: Sins of the Past (1994), dibujada a tres manos por Lee Weeks, Ian Churchill y Ken Lashley, el guionista Mark Waid nos presenta a un Wade Wilson mucho más humano, atormentado aún por traumas del pasado pero que busca desesperadamente un rumbo para su vida aunque no es capaz de dejar de ocultarse bajo su máscara, que no sólo esconde su "fealdad" externa.
Ya en su propia serie regular, el personaje disfrutó de una magistral etapa a cargo de uno de los escritores (junto con Gerry Duggan) que mejor han sabido entender al personaje. Diálogos chispeantes, humor desenfrenado y un tono alocado y casi cartoon (especialmente cuando dibujaba McGuinness) hacen de la serie una de las revelaciones del por aquel entonces aburrido panorama de la editorial. En esta primera serie, Joe Kelly establece el carácter de antihéroe del personaje, que jura que no volverá a matar por dinero, aunque su concepto de lo que significa ser un héroe todavía sea algo que se le escape... Humor y tragedia entrelazadas en una serie memorable.
Hellhouse, el abrevadero frecuentado por mercenarios, la ciega Al, Weasel (Comadreja), la misteriosa organización Landau, Luckman & Lake (L,L&L), T-Ray, Ajax, Daredevil, Typohid Mary... las bases del Universo Deadpool se asientan en estas páginas, en las que presenciamos también un viaje al pasado que se ha convertido en uno de los números más divertidos de la historia del personaje (y de la editorial) y que puso las bases para los "números perdidos" de la posterior etapa de Gerry Duggan y Brian Posehn, donde, a modo de flashbacks, se nos relatan episodios no conocidos del pasado del Universo Marvel... con Deadpool dejando su particular huella como sólo él sabe hacerlo.
Obligado por la sombra de la cancelación, Kelly se ve obligado a cerrar todas sus tramas y subtramas, dando un giro de tuerca final a la historia y despidiéndose a lo grande. Sin embargo, la colección continuaría a manos de Christopher Priest, que realmente fue el primero que se atrevió con la ruptura de la cuarta pared y que decidió que Deadpool fuera consciente de que es un personaje de cómic. Durante la etapa de Priest, Wade se dirigiría constantemente al lector, hablando de lo descabezado de las historias que estaba protagonizando y bromeando sobre todos los clichés habituales del género superheroico.
Después de unos últimos números guionizados por Gail Simone, la serie se canceló para dar paso a una especie de (falso) spin-off llamado Agent-X (2002-2003), que duró 15 números y que jugó al despiste con la identidad de Deapool. Tras esta, llegaría la también aclamada Cable/Deadpool (2004-2008), que llegaría a alcanzar la nada desdeñable cifra de 50 números y estaría guionizada en su totalidad por un viejo conocedor del personaje, Fabian Nicieza.
Deadpool vol. 2 (2008-2012) estuvo guionizado durante sus 63 números por un Daniel Way en estado de gracia. Wade estaba aún más loco que de costumbre, con un par de voces en su cabeza que hablaban con él constantemente, en un intento de acentuar la ambigüedad moral y la inestabilidad mental del personaje. Narrativa vertiginosa, acción violenta, constantes autorreferencias, irreverencia descarada y bastante humor grueso fueron las claves del éxito de este segundo volumen que devolvió al personaje su popularidad perdida exagerando al máximo sus elementos diferenciadores.
Mientras tanto, se iban sucediendo una tras otras diferentes series limitadas sobre el personaje que intentaban aprovechar al máximo el filón (que continúa hasta ahora) y llevó a Deadpool en convertirse en un exitoso producto de merchandising. Hasta los más pequeños adoraban al personaje y se volvía a hablar sobre la posibilidad de hacer esa película que tanto tiempo estaba peleando por sacar adelante un Ryan Reynolds traumatizado después de haber encarnado a aquella falsa versión de la película de Wolverine.
La siguiente serie, Deadpool vol. 3 (2013-2015), duró 45 números, 44 y un último que se renumeró para celebrar la cifra total de 250 números publicados del personaje. Los encargados de este relanzamiento por todo lo alto fueron Gerry Duggan y Brian Posehn. Para le siguiente volumen, Deadpool vol. 4 (2016-2018), Duggan se encargó en solitario de poner fin a la que es considerada por muchos como la mejor etapa del personaje después de la de Joe Kelly. La colección se renumeraría nuevamente y aprovecharía su número 300 para finalizar con un auténtico golpe para el personaje. El guionista cerraba su andadura con el personaje de más de cien números y muchos cambios en su status quo (de criminal, a reformado, a celebridad, para acabar como criminal nuevamente) haciendo que Wade decidiera borrarse la memoria y empezar desde cero.
Después de haberle visto evolucionar como superhéroe, ser humano e incluso padre, una nueva etapa comenzaba para el personaje en su nuevo volumen a cargo de Scottie Young y Nick Klein dentro de la iniciativa Fresh Start de Marvel. Esta vuelta a los orígenes nos presenta a un Deadpool que nuevamente trabaja como mercenario e incorpora algunos elementos vistos en las películas de la Fox. Que para algunas cosas Marvel es muy lista, no cabe duda.
Y ahora empieza lo bueno, o sea, todo aquello que no sabías sobre el personaje, curiosidades bizarras y demás tonterías carentes de interés real pero que demuestran lo mucho que nos gusta el viejo Wade
No necesitamos hacer ninguna introducción interesante... ¡el artículo ya es largo de narices!
Algo más que una copia descarada... ¡pero también!
Aunque Liefeld ideó al personaje como un Spider-Man con pistolas y cuchillos, el aspecto físico y el nombre están claramente inspirados (si no copiados/parodiados directamente) en el personaje de DC conocido como Deathstroke, creado por Marv Wolfman y George Pérez en las páginas de The New Teen Titans.
Incluso el nombre real de Deadpool, Wade Wilson, es sospechosamente parecido al alias de Deathstroke, Slade Wilson. Es curioso como un personaje que nació como una especie de copia barata y sin mucha personalidad se haya convertido en una estrella e incluso sobrepasado en popularidad a su principal inspiración.
Sexualmente fluido
Deadpool es bisexual. O pansexual u omnisexual. O, como mínimo, sexualmente fluido. Según su creador, Fabian Nicieza, debido a su constante regeneración de células cerebrales, Deadpool puede ser hetero un minuto y gay al minuto siguiente. Gerry Duggan ha sido bastante más claro, confirmando que el personaje puede sentirse atraído "por cualquier cosa que tenga pulso". Gail Simone, por su parte, afirma que siempre le ha escrito como pansexual.
Independientemente de sus tira y afloja con Wolverine (dos antihéroes muy diferentes con una sangrienta rivalidad ), el principal objeto de deseo de Deadpool en los cómics ha sido (y es) nada menos que nuestro amistoso vecino Spider-Man, con quien tiene un largo historial de tensión sexual no resuelta.
Aunque la atracción no parece ser recíproca (para tristeza de una parte del fandom que inunda internet con imágenes subidas de tono de ambos personajes), Wade tenía a Spidey el número 5 en su lista de personas con las que podía cometer una infidelidad (acordado con su esposa en aquel entonces, un demonio llamado Reina Shiklah), lo que deja bien claro que su bromance (relación íntima pero no sexual entre dos hombres) podría llegar a palabras mayores si el arácnido fuese un poco más receptivo.
Lo que está claro es que Wade siente adoración por Spidey, al que considera un íntimo amigo y siente que Peter le ha ayudado en muchos momentos a ser mejor persona. En la serie de cómics Spider-Man/Deadpoool (2016-), los dos comparten cabeceras y aventuras, demostrando que además de compenetrarse bien peleando codo a codo tienen una química explosiva.
A veces los personajes escapan a lo que sus creadores han ideado para ellos inicialmente y es el propio público quien les otorga su propia interpretación. Lo que está claro es que, aunque en los cómics solamente le hayamos visto tener relaciones con "mujeres", Deadpool no necesita demostrar nada para que su libertad sexual sea la que es, la de alguien al que no le importa lo que pienses sobre quién le gusta y por qué.
Es un geek en toda regla
Nuestro Mercenario Bocazas favorito es un jugador de MMORPG (videojuegos de rol multijugador masivos), como evidencia su referencia a Leeroy Jenkins, un personaje de World of Warcraft conocido por gritar su nombre cuando se lanza a la batalla.
Sí, también Wade es fan de Dragon Ball y ha demostrado ser un auténtico otaku en diferentes ocasiones.
Su debut en el cine fue una @&%#$»
Más que eso, fue una tragedia. Y lo peor no era que fuese una especie de ninja descamisado que tiraba rayos por los ojos. No, lo peor es que esta "versión" del Mercenario Bocazas... ¡no tenía boca!
Los fans, huelga decirlo, no nos quedamos muy contentos. Sin ninguna duda, una de las escenas más bochornosas y frustrantes de todas las adaptaciones cinematográficas de cualquier personaje de cómic. Menos mal que Ryan Reynolds la odió tanto como el resto de seres inteligentes y no paró hasta conseguir encarnar al auténtico Wade. El resto, como se dice habitualmente, es historia.
Ah, y el propio Reynolds consiguió "vengarse" de esa apócrifa versión en una de las descacharrantes escenas postcréditos de Deadpool 2 (2018).
¡Oh capitán, mi capitán!
Por muy extraño que parezca, Steve Rogers es una de las pocas personas del Universo Marvel a las que realmente les gusta Deadpool. Y el Capi es, de lejos, la única persona a la que Wade respeta y por la que siente una especie de devoción.
No sólo por ser su ídolo cuando era pequeño, sino porque los dos han sido sometidos a experimentos del gobierno, aunque bastante más perversos y dolorosos en el caso de Deadpool. Incluso cuando Steve Rogers fue reemplazado por una versión nazi de sí mismo en el evento Secret Empire (2017), Wade estuvo siempre al lado del Capi.
Fue capaz de derrotar a Galactus con su insoportable verborrea
Tal vez no lo sepáis, pero hubo una vez en que Galactus, el Devorador de planetas, el estómago más insaciable del Universo Marvel, le dio trabajo a Deadpool. Si no os lo creéis, tan sólo tenéis que revisar Deadpool Team-Up #883 (2009), de Scottie Young y Ramón Pérez.
Galactus concedió poderes a Wade para que se convirtiera en su heraldo personal, pero al cabo de un tiempo le acabó quitando los poderes... ¡harto de escucharle hablar constantemente y de sus irritantes comentarios!
Se comió una hamburguesa de carne de vaca vampira
Bessie fue una vaca a la que Drácula echó el diente (para morderla) hace más de 300 años. A partir de ese momento fue conocida como Hellcow, nombre que ya por sí solo provoca escalofríos.
Bessie y Deadpool fueron prisioneros de un científico loco que pretende utilizar los "poderes" de ambos en Deadpool Team-Up #885 (2011), obra de Rick Spears y Philip Bond. Cuando consiguen escapar del laboratorio, el contacto con la luz solar mata a Bessie y la convierte en una hamburguesa... ¡que Wade no duda en zamparse sin pestañear!
Ruptura constante de la Cuarta Pared
Deadpool es famoso por dirigirse directamente al público (lectores, espectadores), ya sea para bromear, hacer referencias a lo que sucede en la historia o incluso manipular a su conveniencia diferentes eventos o situaciones.
El concepto de "cuarta pared" proviene del mundo del teatro y se refiere a esa "pared imaginaria" que separa al espectador/lector de los personajes. Nosotros como público podemos verles, pero ellos a nosotros no y desconocen totalmente nuestra existencia. Cuando se empezó a jugar con la ruptura de esta convención fue principalmente en el mundo de la comedia, con los actores (de cine o de teatro) dirigiéndose a los espectadores buscando su complicidad y provocando hilarantes situaciones humorísticas.
En el caso de Deadpool, el saber que está dentro de una obra de ficción le permite regalarnos absurdos comentarios meta sobre sus propias historias y aventuras, con constantes autorreferencias y surrealistas juegos a costa de sus "globos de pensamiento".
En su videojuego del 2013, fue fiel a su esencia y aprovechaba cualquier oportunidad para burlarse del propio juego y hablar con los jugadores.
Amores ultraterrenales... ¡y ultra tóxicos!
Si no contamos su obsesión por Theresa Cassidy (Siryn), la también mutante hija de Banshee, el revolcón sin relevancia que se dio con Rogue en las páginas de Uncanny Avengers y su relación con Vanessa Carlyle, la mutante multiforme conocida como Copycat que fue su pareja antes de convertirse en Deadpool, Wade Wilson ha tenido dos amores que le han llevado por la calle de la amargura.
Shiklah, Reina de los Muertos, iba a casarse con Drácula cuando Wade apareció en su camino... ¡y saltaron chispas! Después de pasar por el altar, su faceta como héroe al haberse convertido en miembro de los Avengers, hizo que la cosa se fuese poniendo tensa y ella acabó amenazando con convertir Nueva York en un Infierno lleno de monstruos.
Finalmente, se separaron amistosamente y ella se unió a Drácula como su compañera y consorte.
Durante el tiempo que fue torturado en el Programa Weapon-X, su sufrimiento fue tan grande que le llevó en muchas ocasiones a las puertas de la Muerte... literalmente.
Muerte es una de las entidades abstractas del Universo Marvel y la obsesión amorosa de Thanos, el Titán Loco. Muerte siempre busca manipular las cosas a su antojo y no duda en utilizar a los mortales para sus fines. Hasta que llegó Deadpool.
Podemos decir, a costa de que Thanos se enfade y nos borre de la existencia con un simple chasquido de sus dedos, que Muerte ha sido capaz de corresponder a Deadpool (a su manera, claro está), pero la relación entre estos dos tortolitos ha demostrado ser un amor imposible. Eso sí, Wade estará siempre loquito por sus huesos...
Mala, mala, mala persona
En un caso evidente de Síndrome de Estocolmo, la relación de Deadpool con la ciega Al es de todo menos divertida. Aunque desarrollaron una conexión emocional con el tiempo, la pobre señora adicta a las drogas no dejaba de estar secuestrada por Wade, que la retenía encerrada sólo por divertimento.
En uno de los asesinatos a sangre fría más gratuitos e inmorales cometidos por Deadpool, el mercenario se carga a un personaje que se atreve a afirmar que las precuelas de Star Wars son mejores que las trilogía original. Está claro que Wade no es un fan de Jar Jar Binks, pero ¿qué pensará de la nueva trilogía?
Algo que nos cuesta perdonar a Deadpool es que raptara a una persona sólo para tenerle haciendo chimichangas para él constantemente. No sabemos si el señor se llamaba Paco de verdad o era una broma (racista) del mercenario, pero la esclavitud no es algo que nos haga mucha gracia a pesar del contexto paródico del personaje. ¡Punto negativo para Wade!
En una parodia de una campaña de servicio público para alertar y educar a la población, Deadpool es retratado como lo opuesto a los buenos valores encarnados por el Capitán América. Lo más cruel de todo... ¡obligar a los vegetarianos a comer carne!
Miembro "capitalista" de los Avengers
Cuando Steve Rogers fundó el grupo de los Avengers conocido como Unity Squad, ofreció a Wade la posibilidad de convertirse en un miembro con todas las de la ley.
Usando dinero de su propio bolsillo, procedente de las ganancias generadas por el merchandising sobre su imagen, que había alcanzado en aquella época una popularidad desproporcionada, Deadpool fue la principal fuente de apoyo económico para el grupo, lo que no evitó que su membresía fuese cuestionada por muchos.
Egocentrismo a la enésima potencia
Cuando un ser con un nombre tan ominoso como The Contemplator te elige para derrotar a una entidad cósmica conocida como The Awareness que quiere devorar la consciencia de todos los seres del Multiverso, sólo te queda una opción: ¡formar un grupo de Deapools procedentes de diferentes rincones del Multiverso!
Lady Deadpool, Kid Deadpool, Dogpool y Headpool se unieron al Wade Wilson de Tierra-616 para luchar juntos y crear aún más confusión si cabe. Eso sí, tenían su propio juramento, parodiando el famoso del os Green Lantern Corps:
A través de la oscuridad más clara o de la luz más oscura,
No necesitas ningún brillo para unirte a la lucha.
Somos mercenarios con mucho más que bocas,
¡Yippee-ki-yay, somos los Deadpool Corps!
Alimentó a uno de los X-Men
Durante un período de tiempo, Deadpool fue miembro de X-Force, un grupo de mutantes con muy mala leche que enfrentaban amenazas poco convencionales con métodos bastantes discutibles. Nada que ver con la versión de X-Force que apareció en Deadpool 2 (2018), todo hay que decirlo.
En una de sus aventuras más peligrosas, su compañero Archangel (Warren Worthington) estuvo a punto de morir y Deadpool le cuidó hasta que se recuperó... cortando trozos de su propia carne y alimentando al moribundo mutante. No muy agradable, pero indudablemente una buena acción que no nos esperábamos del viejo Wade.
Poco respeto por los clásicos
En la minisere Deadpool Killustrated (2013), el mercenario se "insertó" en el mundo de los clásicos universales de la literatura...¡y no dejó títere con cabeza! Moby Dick, Don Quijote, Mujercitas, Sherlock Holmes, El Libro de la Selva...no hay clásico sagrado ni intocable para Wade Wilson.
Su falta de respeto por los clásicos le hizo protagonizar otra miniserie llamada Night of the Living Deadpool (2014), ambientada en un mundo apocalíptico dominado por zombis, en clara referencia a la saga creada por George Romero, así como a la famosa serie The Walking Dead. Sin embargo, aquí la historia tenía un toque más oscuro y macabro que apenas se veía eclipsado por los toques de humor del personaje.
Asesinó a todo el Universo Marvel
Tal cual. A Deadpool se le va la olla totalmente y decide cargarse a todos y cada uno de los héroes del Universo Marvel, de las formas más crueles y alocadas posibles. No podemos negar que hay una parte de placer culpable en ver morder el polvo a nuestros héroes favoritos a manos del Mercenario Bocazas, pero el nivel de salvajismo de Wade es inaudito.
Como muestra, un botón. Después de asesinar a Bestia de los X-Men, usa su piel para hacerse un abrigo. Nosotros estamos en contra del uso de las pieles de animales, Wade...
Make America DEAD Again
Cuando un ex agente de S.H.I.E.L.D. decide resucitar presidentes americanos muertos (desde George Washington hasta Reagan) para intentar arreglar la sociedad estadounidense, Deadpool tiene que enmendar el desaguisado que se produce cuando todos los zombies deciden inesperadamente destruir los Estados Unidos.
Es donante de órganos
Lo mismo que tiene muchas cosas malas, de vez en cuando Deadpool nos sorprende con acciones que nos dejan con la boca abierta.
En una ocasión, Wade donó la mayoría de sus órganos a unos mutantes que los necesitaban... poniendo a trabajar a toda máquina a su factor curativo para regenerar esos órganos y poder volver a ser donante nuevamente.
Asesinó al Agente Coulson
Bajo las órdenes de un Capitán América transformado en líder de HYDRA, Deadpool recibe la misión de eliminar a un renegado agente de S.H.I.E.L.D. que está siendo un gran incordia para la causa fascista: nada más y nada menos que Phil Coulson, el popular personaje que debutó en los cómics después de su éxito en el UCM (Universo Cinematográfico Marvel).
Al pobre Phil le veremos en la sexta y última temporada de Agents of S.H.I.E.L.D. y en la cuarta película de los Avengers. ¿Vivirá para contarlo?
Es un orgulloso canadiense
Al igual que Ryan Reynolds, Wade es canadiense... y orgulloso de serlo. Que se lo digan a la pobre Celine Dion.
Dorothy es su Golden Girl favorita
En los cómics, Deadpool tiene una afición obsesiva por The Golden Girls, especialmente con Bea Arthur, que interpretaba al personaje de Dorothy Zbornak.
Para la primera película del personaje, Ryan Reynolds quería hacer una referencia al fanatismo de Wade y aprovechó que conocía a uno de los hijos de la actriz para pedirle permiso y poder usar la imagen de Arthur en una camiseta que luce en la película.
Para agradecer el éxito de Deadpool 2, se lanzó un vídeo con imágenes de la película acompañadas de la sintonía de la famosa serie de televisión. Un secreto: nosotros también somos muy fans de The Golden Girls.
Aunque parezca mentira, tiene buena mano con los niños...¡y tiene una hija!
Hace mucho tiempo, Deadpool tuvo un lío con Carmelita Camacho, resultado del cual nació Ellie. Cuando Wade descubrió que tenía una hija, entregó a la custodia de Ellie a la agente de S.H.I.E.L.D. (y sin embargo amiga) Emily Preston, para poder mantener así en secreto su paternidad.
Antes de descubrir que tenía una hija, Wade desarrolló una sincera y entrañable relación paternal con el pequeño Evan Sabahnur, un clon del villano Apocalipsis al que Wade enseña que todos tenemos la capacidad para hacer el mal pero que, al final, somos nosotros quienes tenemos la última decisión.
Nada mal para alguien que lleva toda su vida matando y esforzándose en ser una mejor versión de sí mismo, aunque meta la pata una y otra vez durante el proceso.
