DC Comics es una de las editoriales de cómics estadounidenses más antiguas e importantes. Produce básicamente material sobre superhéroes mundialmente conocidos como Superman, Batman, Wonder Woman, Green Lantern, The Flash, Aquaman, Green Arrow... cuyas historias suceden (por lo menos en su mayor parte) en un universo ficticio compartido.
La compañía también ha publicado material no relacionado propiamente con este universo superheroico, como otros títulos más adultos bajo diferentes sellos o subdivisiones editoriales, como Vértigo, WildStorm o Paradox Press.
Películas de superhéroes
El Universo Cinematográfico de DC Cómics recibió lo que podríamos denominar un relanzamiento con la primera película de Superman dirigida por Zack Snyder, Man of Steel (2013), en lo que supuso un reinicio y punto de partida por parte de Warner para intentar competir contra Disney y Marvel Studios.
Sin embargo, antes de esa especie de relanzamiento, hubo muchas y muy importantes (por su calidad y/o relevancia) adaptaciones de sus personajes más emblemáticos.
1. Superman and the Mole Men (1951)
La primera película protagonizada por el superhéroe más famoso de DC Comics fue dirigida por Lee Sholem y es en realidad el piloto de la serie de televisión Adventures of Superman, que contó con un estreno en la pantalla grande para darle la importancia que se merecía.
Superman sólo había aparecido hasta entonces en los famosos cortos animados de Max Fleischer y en dos seriales cinematográficos: Superman (1948) y Atom Man vs. Superman (1950), de los que hablamos en un epígrafe más abajo.
Rodada en poco más de 12 días y con una duración de 58 minutos, está protagonizada por George Reeves como Superman y Phyllis Coates como Lois Lane, y tiene el honor de ser el primer largometraje basado en cualquier personaje de DC Comics.
2. Batman (1966)
La primera película oficial de Batman fue producida en 1966 por la 20th Century Fox, derivada del tremendo éxito de la serie de televisión.
Contó con los mismos productores y con casi todo el reparto de la serie, a excepción de Catwoman, que fue interpretada por Lee Meriwether en sustitución de Julie Newmar, que había interpretado al personaje durante las dos primeras temporadas.
Al igual que la serie, la película tiene un tono desenfadado y humorístico que, a pesar de no agradar del todo a los fans del personaje, contribuyó al éxito del personaje y de la Batmanía.
Llena de momentos camp que oscilan entre lo descacharrante y lo ridículo, sirve como reflejo paródico de la tendencias culturales de mediados de los 60, con constantes alusiones a la Guerra Fría.
3. Superman (1978)
Considerada por muchos como una de las mejores películas de superhéroes de todos los tiempos, constituye sin duda la quintaesencia del género y su gran pionera. A finales de los años 70, Superman se convirtió en todo un éxito y consiguió hacernos creer que un hombre podía volar. La clave, algo tan difícil como ser una película con alma, lo que explica que marcara a toda una generación y siga fascinando a los que la ven por primera vez tantos años después.
La película de Richard Donner lo tiene todo y en la medida justa: acción, humor, romance, actores en estado de gracia... y a Christopher Reeve, el carisma hecho hombre, la representación en carne y hueso del último hijo de Krypton. No ha habido ni habrá nadie como él, capaz de encarnar el poder y la vulnerabilidad a partes iguales.
El Superman de Reeve es humano y vulnerable, capaz incluso de alterar el curso de la historia por amor. En su intento de mantenerse fiel al juramento de proteger su mundo adoptivo, Donner y el guionista Tom Mankiewicz nos muestran al personaje como una metáfora sobre de Dios y Jesucristo, y el tono mesiánico acompaña al personaje desde su misma llegada a la Tierra.
Además de contar con la presencia física que requería el personaje, Reeve encarnaba la quintaesencia del espíritu norteamericano. Con sus gestos, miradas y sonrisas era capaz de interpretar al apocado e inseguro Clark Kent y al superhombre venido del espacio.
Con la contratación de Mario Puzo para escribir el libreto original y la incorporaciones de Marlon Brando (que cobró 4 millones de dólares por dos semanas de rodaje) y Gene Hackman, la película se convirtió en una de las producciones más caras de la historia del cine. La brillante partitura de John Williams es una de las músicas más reconocibles de todos los tiempos, capaz de emocionarnos cada vez que la escuchamos y hacernos evocar a Superman en cada nota.
Lex Luthor, Otis y la voluptuosa Srta. Teschmacher ponen el toque de humor, mientras la increíble química entre Reeve y Margot Kidder (Lois Lane) se encargan del resto, regalándonos una historia de amor atemporal, mientras vuelan abrazados por los cielos de Metrópolis.
4. Superman II (1980)
El artesano Richard Donner comenzó a filmar simultáneamente Superman y Superman II, pero abandonó la secuela antes de terminarla por "diferencias" con los productores, los Salkind. Sin embargo, fue él quien rodó gran parte del metraje, aunque luego Richard Lester terminara la película y pusiera su firma como director.
Superman II: The Richard Donner Cut (2006) es la versión de la película con el metraje filmado originalmente por Donner y su propio montaje, con nuevas escenas nuevas y cambios bastante importantes. Marlon Brando no permitió que se usaran imágenes suyas filmadas de la primera entrega porque pidió una cantidad desorbitada de dinero, lo que le hizo enfrentarse a Richard Donner.
Esta fantástica película de aventuras en la que Terence Stamp borda su papel del villano General Zod, pone más énfasis en la parte humorística y romántica de la trama, frente al tono más serio de la versión de Donner. Superman se debate entre llevar una vida normal como un ser humano junto al amor de su vida o seguir entregado a sus responsabilidades superheroicas como campeón de la humanidad.
El cambio hacia un tono más familiar y para todos los públicos supuso un punto de inflexión en las aventuras del Hombre de Acero, lo que se notará gravemente en las siguientes entregas de la franquicia y que serán para el personaje más letales que la kriptonita.
5. Swamp Thing (1982)
Wes Craven dirige la que seguramente sea la peor película de su filmografía y una de las peores adaptaciones que se ha hecho nunca de un personaje de cómic.
Centrándose más en la acción que en el terror, lo peor es el maquillaje de Swamp Thing, un horrible traje de plástico tremendamente artificial que le quita toda la credibilidad al monstruo del pantano.
En definitiva, un film de serie B, con un bajísimo presupuesto y unos lamentables efectos especiales.
6. Superman III (1983)
La tercera parte de la saga está muy por debajo de sus predecesoras. La dirección de Richard Lester se nota en un tono cómico predominante durante toda la película, lo que se muestra ya desde la hilarante secuencia inicial, con esa concatenación de pequeños desastres que desemboca en la aparición de Superman.
El protagonismo recae en un Richard Pryor que no encaja para nada en la historia y que incluso roba protagonismo al propio Superman. Gus Gorman es un excéntrico millonario con ínfulas de conquistar el mundo que se acaba convirtiendo en el insoportable villano. Su presencia es tan desproporcionada que aburre sobremanera y nos hace dudar si estamos viendo una comedia o una película de superhéroes.
Lo mejor es la parte que se desarrolla en Smallville, donde conocemos al primer amor de Clark, una encantadora Lana Lang encarnada por Annette O'Toole, que muchos años después interpretaría el papel de Ma Kent en la serie Smallville.
Por su parte, Christopher Reeve puede lucirse en tres papeles diferentes: como Clark Kent, como Superman y como el Superman malvado. El "lado oscuro" del héroe es abordado de manera superficial pero interesante y nos regala una de las mejores escenas de la película, la pelea en el desguace de coches entre sus dos personalidades.
7. Supergirl (1984)
Rodada en su mayor parte en los estudios Pinewood de Londres, la película fue un auténtico fracaso a todos los niveles. Dirigida por Jeannot Szwark y con música de Jerry Goldsmith, su flojo guión lleno de incoherencias y las histriónicas interpretaciones de Peter O'Toole y Faye Dunaway (ambos nominados a los Razzie) desmerecen totalmente una película que, sin embargo, cuenta con una estupenda Helen Slater como Supergirl.
Los Salkind pensaron inicialmente en Brooke Shields como Supergirl y en Dolly Parton como Selena. También se barajó la participación de Christopher Reeve, que repetiría su rol como Superman dando la bienvenida a Kara a la Tierra, pero finalmente el actor desistió de participar.
Como curiosidad, comentar que los títulos de crédito de la película costaron un millón de dólares de la época y que Slater fue fue nominada al Saturn Award a la “Mejor Actriz en una película de Horror, Fantasía o Ciencia Ficción”.
8. Superman IV: The Quest for Peace (1987)
La última película de Superman que protagonizó Christopher Reeve fue un completo fracaso comercial y una vergonzosa producción que mató al personaje, cinematográficamente hablando, durante casi 20 años. El propio Reeve confesó apenado que se avergonzaba de la película. Es más, solo aceptó formar parte del reparto a cambio de que le dejaran tomar decisiones sobre la historia, encargarse de la segunda unidad de rodaje y de conseguir financiación para otro de sus proyectos en cine.
Debido a una complicada situación económica, los Salkind tuvieron que vender su opción de realizar una cuarta entrega a The Cannon Group, que se propuso recuperar un tono más adulto y acorde con la realidad social y política que se vivía en el mundo en aquel momento, con el temor nuclear de fondo. Evidentemente, el resultado fue todo lo contrario, a pesar de los esfuerzos del director Sidney J. Furie.
Todo el equipo de efectos visuales de las anteriores entregas renunció por considerar su salario insuficiente. El rodaje quedó a medias y tuvo que contratarse a un director peor aún que el primero. Para los escasos 90 minutos de metraje (es la más corta de toda la saga) se reaprovecharon los mismos planos una y otra vez y fue nominada a los Razzie a los peores efectos especiales.
9. The Return of Swamp Thing (1989)
Esta secuela dirigida por Jim Wynorski, a pesar de contar con un presupuesto similar a la de la primera parte, está mucho más conseguida técnicamente, destacando el maquillaje del protagonista y un trabajo de caracterización brillante, con bastantes más similitudes con el cómic en el que se basa.
Mucho más entretenida y divertida que la película de Craven, podemos definirla como una comedia de acción con toques de ciencia ficción.
Dirigida a un público más adolescente e infantil, destaca el trabajo de Sarah Douglas como la doctora Lana Zurrell y el de Heather Locklear como Abby Arcane.
10. Batman (1989)
Con motivo del 50º aniversario de la creación del personaje, el Batman de Tim Burton reventó las taquillas en 1989. A pesar de las reticencias iniciales por parte de casi todo el mundo, Michael Keaton cumplió más que sobradamente con su interpretación de Batman / Bruce Wayne, mientras que un histrónico Jack Nicholson ofreció un Joker que marcó un antes y un después en la caracterización del personaje, por lo menos hasta la versión de Heath Leger. "¿Has bailado alguna vez con el diablo a la luz de la luna?"
Nicholson fue elegido para el papel cuando Bob Kane (creador del personaje) le pintó al actor el pelo de verde, la cara de blanco y los labios de rojo en un poster de The Shinning (1980) y se quedó asombrado con el tremendo parecido.
La Gotham de Burton, con diseños de Anton Furst, aderezada por la magistral música de Danny Elfman y creada en estudios interiores en Londres, está repleta de calles y avenidas oscuras y terroríficas, edificios imponentes sacados del expresionismo alemán y una atmósfera claustrofóbica que le iba como al pelo al mundo del Hombre Murciélago.
La película se convirtió en uno de los filmes más taquilleros de todos los tiempos, recibió varias nominaciones a los Premios Saturn, una a los Globos de Oro y ganó el Óscar a la mejor dirección artística, por el trabajo de Peter Young y Anton Furst. Su éxito inspiró la creación de Batman: The Animated Series y el logo de Batman se convertiría, gtacias a una brillante campaña de marketing, en uno de los emblemas más reconocibles de todos los tiempos.
11. Batman Returns (1992)
Su premisa y la traman recaen en el juego de la doble identidad y en la dualidad entre héroe y villano. El Pingüino podría perfectamente ser una versión retorcida de Batman, por eso es tan terrible y triste la secuencia ( que emula a la fábula de la salvación del Moisés bebé) donde vemos a los padres de Cobblepot arrojando a su monstruoso hijo en una canasta al río que da a un desagüe, donde le espera una muerte segura.
La Catwoman de Michelle Pfeiffer y el Pingüino de Danny DeVito son las auténticas estrellas de la función. Antes de Pfeiffer, Demi Moore, Annette Bening y Nicole Kidman fueron candidatas al papel. Michelle demostró su entrega al personaje metiéndose de verdad un pájaro en la boca durante una de las escenas.
A pesar de algunos problemas de ritmo y unas escenas de acción bastante torpes, Burton consiguió trasladarnos completamente a un cuento perverso y tenebroso donde los "monstruos" son aquellos que nos despiertan más empatía.
12. Batman Forever (1995)
Warner sustituyó a Burton por Joel Schumacher, que tenía en mente una precuela basada en Batman: Year One, pero que tuvo que plegarse a las exigencias de la productora. El resultado fue un desvarío pop bastante divertido que se inspiraba en la serie televisiva de los años 60 y en los cómics ilustrados por Dick Sprang.
A pesar de las malas críticas, es de rigor destacar la estupenda dirección artística, la histriónica pero entregada actuación de Jim Carrey como el Acertijo (Riddler) y una banda sonora llena de grandes canciones. Divertida, desenfadada y espectacular visualmente, pocos entendieron y aceptaron esta ruptura con la oscuridad de las dos primeras entregas.
Como curiosidad, el artista y diseñador H.R. Giger (responsable de la imagen del xenomorfo de Alien) presentó una propuesta de Batmobile que fue finalmente descartada al ser considerada muy siniestra. Aunque no os lo creáis, a Bob Kane le encantó Val Kilmer, afirmando incluso que es uno de los actores que mejor ha interpretado a su creación.
Tommy Lee Jones, que encarnaba a Dos Caras, no soportaba a Carrey y durante el rodaje dejó muy clara su animadversión por su compañero.
13. Batman & Robin (1997)
Debido al gran éxito de la anterior entrega, el estudio se lanzó rápidamente a continuar exprimiendo la gallina de los huevos de oro... y acabó matando a la gallina. Schumacher volvió a dirigir y cuando Val Kilmer decidió no volver a interpretar al personaje debido a conflictos contractuales, David Duchovny y William Baldwin fueron considerados para el papel. Finalmente, George Clooney se hizo con el manto del murciélago, nuevamente con Chris O'Donnell como Robin y con dos villanos de opereta: Poison Ivy (Uma Thurman) y Arnold Schwarzenegger (Mr. Frío).
La película fue un fracaso de crítica y público e incluso fue considerada una de las peores de la historia. Debido a esto, Warner Bros. canceló su secuela, Batman Unchained (conocida también como Batman Triumphant), y el personaje quedaría en la recámara hasta que Nolan reinició la franquicia con Batman Begins en 2005.
La joven Alicia Silverstone (que se había convertido en la chica de moda con la película Clueless) tuvo que sufrir ataques virulentos de una parte de la prensa especializada (¿alguien dijo trolls?) cuando se filtró que muchas de sus escenas como Batgirl tuvieron que ser eliminadas porque había engordado durante el rodaje y el equipo de vestuario había tenido de rehacer su traje.
Clooney confesó posteriormente que el traje era tan incómodo y le costaba tanto ponérselo y quitárselo que muchas veces tenía que orinarse encima. Y mucho antes de Tom Hardy, Bane debutó en esta película como un lacayo hipermusculado y con pocas luces que no hacía honor al personaje. De los pezones de los trajes mejor no hablamos, ¿verdad?
14. Steel (1997)
John Henry Irons (Steel) es un superhéroe afroamericano creado por Louise Simonson y Jon Bogdanove en Adventures of Superman #500 (1993) que se hizo rápidamente muy poular y llamó la atención del jugador de baloncesto Shaquille O'Neal, que se propuso rodar una película sobre el héroe para su propio lucimiento.
Dirigida por Keneth Johnson con un modesto presupuesto, su recaudaciones fueron desastrosas. Después de Meteor Man (1993) y Blade (1998), es la tercera película con un superhéroe afroamericano como protagonista.
No se hace en la película ninguna alusión a la existencia del Hombre de Acero. Sin embargo, el personaje lleva un tatuaje de Superman en el brazo, ya que O'Neal es un gran fan del personaje en la vida real.
15. Catwoman (2004)
Además de ser una de las peores películas de superhéroes de todos los tiempos, este engendro dirigido por Pitof casi arruina la carrera de Halle Berry. La actriz demostró su gran profesionalidad y su sentido del humor cuando aceptó recoger el Razzie que ganó como Peor Actriz por el papel.
En esta versión, se le atribuyeron al personaje orígenes místicos, siendo Catwoman una especie de emisaria de la diosa egipcia Bast. Para acabar de empeorarlo, le cambiaron el nombre a Patience Philips y la acción no transcurría en Gotham.
Una poco inspirada Sharon Stone haciendo el papel de mala malísima, una dirección nada inspirada, unos efectos visuales vergonzosos... ¿Hemos dicho ya que nos parece una película infumable?
16. Constantine (2005)
La cinta dirigida por Francis Lawrence recibió furibundas críticas por parte de casi todo el mundo, pero dista mucho de ser una película tan horrible como nos quisieron hacer creer.
Evidentemente, Keanu Reeves está en las antípodas del irlandés rubio y macarra con aspecto de Sting que es el verdadero John Constantine, pero el resto del reparto eleva bastante el listón: Rachel Weisz, Djimon Hounsou, Tilda Swinton, Peter Stormare y Shia LaBeouf.
Bastante entretenida y visualmente espectacular, se aleja de su versión comiquera para ofrecernos su propia versión de la guerra entre el Cielo y el Infierno con unos efectos especiales muy solventes y una fotografía que aporta una atmósfera neonoir que le viene como anillo al dedo a la historia.
17. Batman Begins (2005)
Christpher Nolan tomó el Superman de Richard Donner como modelo a seguir, alejándose con eso de las versiones de Tim Burton y Joel Schumacher para ofrecer una visión más realista y adulta que explicase a fondo los orígenes del personaje. Uno de los puntos más criticados fue la forma en la que el director encaró las escenas de acción, que inducían a la confusión y resultaban poco atractivas visualmente.
Christian Bale decidió alterar su voz cuando está vistiendo el traje de Batman para mostrar ese efecto más amenazante que el vigilante quiere producir en los criminales a los que persigue. El actor se mete de lleno en el personaje y transmite perfectamente la dualidad Bruce Wayne / Batman, reflejando sus heridas emocionales a la vez que su obsesión como justiciero que quiere limpiar su ciudad de la corrupción.
Un guión bastante bien hilvanado y un reparto de lujo sirvieron para redimir al personaje ante la crítica y el público, dando comienzo a una trilogía que es recordada por todo gran aficionado a los cómics y al séptimo arte.
18. V for Vendetta (2005)
Basada en el magistral cómic homónimo de Alan Moore y David Lloyd, la primera película de James McTeigue contó con la producción de las hermanas Wachowski, que venían de triunfar con la trilogía de Matrix. Aunque es una buena película, se pierde gran parte del mensaje de la obra original y fue criticada duramente por Moore.
Su crítica de la opresión y la corrupción, hablando claramente de terrorismo de estado, alimentó la mecha de movimientos sociales de protesta como Occupy, Anonymous o el 15M, que han utilizado la máscara de Guy Fawkes como símbolo en sus reivindicaciones.
Combinando escenas de acción espectaculares con una trama adulta y política cargada de simbolismo, el punto fuerte de la película es su protagonista, que se esconde bajo el sobrenombre de V y es encarnado por un Hugo Weaving cuyo cara no vemos en ningún momento. A su lado, una estupenda Natalie Portman como Evey, una adolescente que acaba desarrollando una relación bastante especial con el enmascarado de perpetua sonrisa.
19. Superman Returns (2006)
A pesar de que todo el mundo esperaba con ilusión este regreso a la pantalla grande del Hombre de Acero, esta película dirigida por Bryan Singer acabó siendo una decepción a casi todos los niveles y cerró la posibilidad de comenzar una nueva saga.
El Superman interpretado por Brandon Routh (que da bastante bien el tipo, sobre todo a nivel físico) resulta acartonado y carente de emociones, lo que unido a la absoluta falta de química con una insípida Kate Bosworth hace que la trama sentimental sea poco interesante y afecte aún más al ritmo soporífero de la película. Un bufonesco Kevin Spacey tampoco cumple con la versión amenazadora que todos esperábamos de Lex Luthor a esas alturas.
Su gran problema es no saber distanciarse lo suficiente de la película de Richard Donner, pero no deja de ser una película correcta, entretenida a pesar de su excesiva duración y que consigue devolvernos aunque sea por momentos la mejor imagen del héroe por excelencia.
20. The Dark Knight (2008)
La mejor película de la trilogía de Nolan destaca especialmente por el trabajo de Heath Ledger como Joker, un prodigioso ejercicio de sobreactuación contenida donde es capaz de pasar de la lucidez más absoluta a la violencia más irracional. Ledger nos regala la mejor y la última actuación de su carrera, que no sólo le otorgaría un premio Oscar póstumo, sino que le convertiría en un icono de la cultura popular y en uno de los personajes cinematográficos mas emblemáticos del cine de los últimos tiempos.
De igual forma, el Bruce Wayne/Batman de Christian Bale sufre una creíble e intensa evolución como personaje, madurando con respecto a la anterior película y evidenciando que no habría héroe sin villano y tal vez sean las dos caras de la misma moneda. Aaron Eckhart interpreta a un Harvey Dent que resulta definitorio para el desenlace de la película.
Más que una película de superhéroes, podría definirse como un thriller policíaco de primer categoría, con un brillante equilibrio entre la acción y el drama y con un reparto de quitar el hipo.
21. Watchmen (2009)
Para contentar a los fans lo máximo posible (que no a Alan Moore, que nuevamente arremetió contra la adaptación de su obra), Zack Snyder optó por una fidelidad máxima a la hora de trasladar a la pantalla esta fábula sobre una sociedad distópica derivada de la existencia de superhéroes y la reflexión sobre la propia esencia del mito del superhombre.
A pesar de su acertadísima (y lujosa) traducción a imagen en movimiento de la estética del cómic, el carácter lento y contemplativo de la película hace que la implicación emocional con los personajes sea bastante difícil de conseguir. Los brillantes títulos de crédito, acompañados de la canción The times are a changin´ de Bob Dylan, nos resumen a la perfección la historia de los Minutemen y su caída en desgracia.
Junto con la película, se rodaron dos trabajos complementarios que fueron editados directamente en DVD. Uno de ellos es Under the Hood (Bajo la máscara), un falso documental sobre la época dorada de estos superhéroes en los Estados Unidos. El segundo es un mediometraje de animación titulado Watchmen: Tales of the Black Freighter (Watchmen: las Crónicas del Carguero Negro), que adapta el cómic que lee uno de los personajes secundarios.
22. Jonah Hex (2010)
Adaptación del personaje creado por John Albano y Tony Dezuniga, la película dirigida por Jimmy Hayward adolece de un guión lleno de lugares comunes del cine de género, con una historia totalmente previsible cargada de venganzas, amores imposibles y villanos de opereta indignos de un western.
Debido a su estrepitoso fracaso en la taquilla americana, la Warner no se arriesgó a estrenarla en la gran mayoría del resto del mundo, donde acabó siendo editada directamente en DVD/Blu Ray.
La encarnación en pantalla de Jonah Hex fue Josh Brolin, que acabó renegando de la película. Acompañando al futuro Thanos están Megan Fox, John Malkovich, Michael Fassbender y Michael Shannon. Una pena que no consiguieran trasladar ni por asomo nada del espíritu original del personaje del cómic.
23. Green Lantern (2011)
Martin Campbell acometió el encargo de condensar una historia demasiado farragosa con un simplón y flojo argumento y fracasó estrepitosamente en el intento.
A pesar de unos efectos especiales bastante convincentes y un presupuesto excesivo, un divertido Ryan Reynolds (que se redimiría encarnando a Deadpool) no resulta capaz de meterse plenamente en el papel, a pesar de sus evidentes esfuerzos.
Plana y fallida, con un desarrollo incoherente y la presencia totalmente desaprovechada de secundarios de lujo como Tim Robbins, Angel Basset o Peter Sarsgaard, la película se convierte en un producto mediocre que desmerece totalmente la fuerza del personaje del cómic.
24. The Dark Knight Rises (2012)
Aunque contiene algunos de los momentos más emocionantes de la trilogía, la película está llena de decisiones bastante cuestionables por parte de Nolan que la convierten en la más desigual de las tres.
Aunque es un buen cierre, ni los personajes ni la historia terminan de brillar ni impactar como merecen y algunas licencias de guión bastante autoindulgentes lastran enormemente el resultado final.
Película de acción más que de superhéroes, presenta al Batman más humano, obligado a tomar una decisión que afectará radicalmente su vida y su carrera como justiciero.
A pesar de sus defectos, Nolan hizo historia con su trilogía y dejó al personaje a un nivel muy alto para los que vinieron después. Y si no, que se lo digan a Ben Affleck.
Seriales cinematográficos
El serial cinematográfico es un formato deudor del folletín decimonónico que tuvo su época de mayor apogeo entre 1935 y 1945, aunque ya existía en la época del cine mudo. Precursor en cierta forma de las series de televisión, era una historia larga contada lo largo de varios episodios (entre 12 y 15), cada uno de los cuales siempre terminaba con un cliffhanger, palabra inglesa que literalmente significa "colgado de un precipicio" y que se usa para denominar las situaciones en las que los personajes protagonistas se encuentran en un peligro mortal aparentemente insalvable justo al final de cada episodio, para generar suspense y dejar en vilo al espectador para engancharle y que no se perdiese la siguiente entrega.
Los seriales se emitían generalmente antes de la proyección de una película en las sesiones de cine matinal de los sábados, conocidas como matinees. La duración de cada episodio solía ser de entre 15 y 18 minutos.
Adventures of Captain Marvel (1941)
Este serial en blanco y negro de 12 capítulos de Republic Pictures fue la primera adaptación cinematográfica de un personaje de cómic.
Estuvo producido por Hiram S. Brown, Jr., dirigido por John English y William Witney, y protagonizado por Tom Tyler en el papel de Captain Marvel y Frank Coghlan, Jr. como su alter ego, Billy Batson.
El superhéroe de Fawcett Comics luchaba contra un peligroso cerebro criminal enmascarado llamado el Escorpión.
Este serial sirvió de inspiración a Jerry Ordway para su novela gráfica The Power of Shazam! (1994).
Spy Smasher (1942)
Basado en el personaje original de Fawcett Comics (actualmente propiedad de DC), Spy Smasher fue un serial de 12 episodios de Republic Pictures dirigido por William Witney con Kane Richmond y Marguerite Chapman como principales protagonistas. En 1966 se hizo una película para televisión con el título Spy Smasher Returns utilizando metraje del serial original.
Es considerado uno de los mejores seriales de todos los tiempos, destacando por sus efectos especiales y sus espectaculares escenas de acción.
Spy Smasher apareció en un flashback ambientado en la Segunda Guerra Mundial en un episodio de la serie animada Justice League Unlimited.
Batman (1943)
Este serial de 15 capítulos de la Columbia Pictures estuvo protagonizado Lewis Wilson como Batman, Douglas Croft como Robin, J. Carrol Naish como el malvado Dr. Daka, Shirley Patterson como Linda Page (el interés romántico de Bruce Wayne) y William Austin como Alfred. Aquí Batman es un agente del gobierno de los EE.UU. que trata de derrotar a los agentes japoneses del Dr. Daka, un villano cuyo plan consistía en convertir a las personas en una especie de zombis.
Se estrenó en plena Segunda Guerra Mundial, cuando los principales enemigos de Estados Unidos eran los alemanes y los japoneses, por lo que se usó como una especie de propaganda del sentimiento nacionalista. Esto explica que el personaje trabajara como agente secreto del gobierno y que la historia estuviese plagada de comentarios xenófobos contra los japoneses que serían eliminados para la edición en formato de vídeo que se comercializó en los años 80.
La primera aparición cinematográfica de Batman con actores reales es importante por haber aportado dos elementos fundamentales a la mitología del personaje. En primer lugar, presentó la Batcueva, llamada en este caso "The Bat's Cave" (ya que no se podía usar el término "Batcave" de los cómics). Por otro lado, el Alfred de William Austin lucía un físico delgado y un fino bigote fino, en contraposición a la versión del cómic en aquella época, donde el mayordomo era más gordo y no tenía bigote.
Debido a su bajo presupuesto, se sustituyó al Batmóvil por un elegante Cadillac negro.
Hop Harrigan (1946)
Hop Harrigan fue el protagonista de un programa de radio de larga duración en el canal ABC y un personaje habitual en las páginas de All American Comics, el cómic donde también debutó el Green Lantern original, Alan Scott.
Su serial constó de 15 capítulos dirigidos por Derwin Abrahams y producidos por Sam Katzman. El personaje se convirtió en propiedad de DC Comics, pero acabó cayendo en el olvido rápidamente.
The Vigilante (1947)
El personaje debutó en Action Comics #42 (1941) como un cowboy cantante de radio reconvertido en luchador contra el crimen junto a un sidekick chino preadolescente, Stuff the Chinatown Kid. En el serial dirigido por Wallace Fox, Stuff (transformado en blanco por arte de magia) fue interpretado por George Offerman, mientras que Jr. Ralph Byrd encarnó al Vigilante.
Superman (1948)
Este serial producido por Columbia Pictures supuso la primera incursión en imagen real del Hombre de Acero en la gran pantalla. Tras el gran éxito de los cortos de los hermanos Fleischer y el serial radiofónico, el personaje se había convertido ya en todo un icono de la cultura americana.
Las aventuras que vivía Superman en los seriales cinematográficos estaban directamente inspiradas por los episodios radiofónicos de la Mutual Network, a los que debemos frases tan populares como "Esto es un trabajo para Superman" y "Arriba, arriba y a volar", además de ser los primeros en introducir la kryptonita como elemento letal para el Hombre de Acero, algo que posteriormente se adaptaría al cómic. La novela de George F. Lowther Adventures of Superman, publicada en 1942, fue también una gran fuente de inspiración para estas historias.
Compuesto por 15 episodios en blanco y negro dirigidos por Spencer Bennet y Thomas Carr, está protagonizado por Kirk Alyn como Superman y Noel Neill como Lois Lane. Tommy Bond fue Jimmy Olsen y Pierre Watkin interpretó a Perry White, el editor del Planet. Como villano del serial apareció un personaje que se hizo llamar La Mujer Araña, interpretada por Carol Forman. Thomas Carr dirigiría después muchos episodios de la serie de televisión The Adventures of Superman, donde Noel Neill repetiría su papel de Lois Lane a partir de la segunda temporada.
Proyectada inicialmente en sesiones matinales de cine, cada episodio terminaba en un cliffhanger de infarto. Los efectos especiales eran muy limitados, lo que llevó a que el actor fuera sustituido por un dibujo animado en todas las escenas de vuelo.
Kirk Alyn realizó una interpretación bastante correcta del personaje, de Superman, utilizando diferentes registros de voz para sus dos identidades de Superman y Clark Kent, y encargándose él mismo de las escenas de acción.
Congo Bill (1948)
Congo Bill: King of the Jungle fue producido por Columbia Pictures y contó con la dirección de Spencer Gordon Bennet y Thomas Carr durante sus 15 episodios.
Don McGuire interpretaba a Congo Bill, famoso cazador y entrenador de animales que es enviado a la jungla africana para encontrar a una heredera desaparecida.
Batman and Robin (1949)
Concebido como secuela del serial de 1943 y también producido por Columbia Pictures, este nuevo serial de 15 capítulos contó con un reparto totalmente diferente. Robert Lowery interpretó a Batman / Bruce Wayne, mientras que Johnny Duncan encarnó a Robin / Dick Grayson. Otros actores fueron Jane Adams como Vicki Vale, Lyle Talbot como el Comisario Gordon, William Fawcett como el Profesor Hammil y Eric Wilton como Alfred Pennyworth.
En esta ocasión, Batman y Robin tuvieron que enfrentarse a un misterioso villano conocido como El Mago, cuya identidad será un secreto hasta el final de la serie. Este malvado encapuchado operaba desde un laboratorio en una cueva secreta, desde donde utilizaba una tecnología de "control remoto" para sumir en el caos a Gotham City mediante la manipulación de todos los coches y trenes de la ciudad. El Mago también tenía poderes hipnóticos y la habilidad de volverse invisible.
Los trajes del Dúo Dinámico se actualizaron, con capas más oscuras para ambos y medias largas de color rosa para Robin, que cubrían unas piernas bastante peludas. Por otro lado, la capucha de Batman le da un aspecto bastante ridículo por no ajustarse demasiado bien al actor y el antifaz de Robin es también demasiado grande.
Al igual que en el serial de 1943, el Batmóvil es nuevamente un coche normal y corriente, aunque esta se vez se sustituyó al Cadillac por un Mercury de 1949.
Atom Man vs. Superman (1950)
De nuevo compuesto por 15 episodios y dirigido una vez más por Spencer Bennet, el segundo serial de Superman introdujo como villano al personaje de Lex Luthor, que adoptaba la identidad enmascarada de Atom Man para ejercer su actividad criminal sin ver comprometida su reputación pública de respetado propietario de una cadena televisiva.
El actor Lyle Talbot se convirtió en el primer Lex Luthor de carne y hueso de la historia de Superman y también participó en el serial de Batman de 1949 en el papel del Comisario Gordon. Posteriormente, trabajaría en muchas películas de Ed Wood, conocido como "el peor director de la historia del cine".
Con la llegada de los televisores a los hogares norteamericanos, los seriales perdieron público y popularidad y acabaron siendo sustituidos por las series de televisión.
La heredera de estos seriales fue la serie Adventures of Superman (1952-1958), en la que Kirk Alyn fue sustituido por George Reeves tras pedir un aumento de sueldo que no le fue concedido.
Blackhawk (1952)
Blackhawk: Fearless Champion of Freedom fue producido por Columbia Pictures y contó con 15 episodios de doce minutos.
Blackhawk y su Blackhawk Squadron, compuesto por Andre, Boris, Chop-Chop, Chuck, Hendricksen, Olaf y Stan, lucharon contra el misterioso Líder. El personaje estaba siendo publicado en aquel momento por la editorial Quality Comics.
El papel principal de Blackhawk fue interpretado por Kirk Alyn, el famoso primer actor que interpretó a Superman en sus dos exitosos seriales cinematográficos.
Producido por Sam Katzman y dirigido por Spencer Gordon Bennet y Fred F. Sears, fue el último serial con el tema de aviación de fondo, debido al auge de la ciencia ficción.
Sello Vértigo
La línea adulta de cómics de la editorial ha contando también con alguna adaptación a la gran pantalla, aunque no hayan sido especialmente memorables. Material hay mucho y muy bueno, así que no perdamos las esperanzas de que algo del excelente catálogo del sello Vértigo se convierta en algún momento en una gran película.
The Losers (2010)
The Losers era un cómic de los años 70 escrito por Robert Kanigher que trataba sobre un grupo comando en la Segunda Guerra Mundial. El guionista Andy Diggle realizó una especie de reboot del concepto a comienzos del nuevo milenio, transformando al grupo en un equipo de mercenarios traicionado por sus superiores que deciden buscar venganza.
La película dirigida por Sylvain White no deja de ser un torpe y descarado reciclaje de las películas de acción de los años 80. Su reparto, eso sí, es lo mejor de todo: Idris Elba, Jeffrey Dean Morgan, Chris Evans, Óscar Jaenada y Zoe Saldana.
The Kitchen (2019)
The Kitchen es una serie escrita por Ollie Masters y dibujada Ming Doyle que narra la historia de las bandas criminales de los años 70. Cuando tres de los grandes capos son capturados por el FBI, sus esposas se convierten en las responsables de llevar los negocios sucios (y peligrosos) de sus maridos, descubriendo que se les da mejor de lo que podían imaginar.
Producida por New Line Cinema y escrita y dirigida por Andrea Berloff, la adaptación cinematográfica está protagonizada por Melissa McCarthy, Tiffany Haddish y Elisabeth Moss.
Paradox Press
Este efímero sello de DC Comics (1993-2001) estaba orientado a un público mayoritariamente adulto y es conocido básicamente por dos novelas gráficas sobre cuyas adaptaciones vamos a hablar a continuación.
Road to Perdition (2010)
Sam Mendes dirigió esta exitosa película que adaptaba la novela gráfica del mismo nombre realizada por Max Allan Collins y Richard Piers Rayner. Protagonizada por Tom Hanks, Paul Newman, Jude Law y Daniel Craig, está ambientada en la época de la Gran Depresión y narra la historia de Mike Sullivan (Hanks) y su hijo, que buscan vengarse de un mafioso que asesinó al resto de su familia.
Supuso la última aparición cinematográfica del mítico Paul Newman, que recibió una merecidísima nominación al Oscar como mejor actor de reparto.
Mientras el cómic original bebe de las clásicas películas de gángsters, la novela negra, el cine de Hong Kong y el manga (con reminiscencias incluso del Lone Wolf & Cub de Kazuo Koike), la película prefiere adoptar un tono lírico carado de épica propio de las Grandes Historias Americanas.
A History of Violence (2005)
La adaptación a la gran pantalla de la novela gráfica de John Wagner y Vince Locke se convirtió en una de las mejores películas de la filmografía de David Cronenberg. La iconografía y mitología vinculada a Estados Unidos sirve de telón de fondo para retratar la violencia innata al ser humano y cómo podemos convivir con ella.
Cronenberg evita hablar de buenos y malos, de héroes y villanos. La naturaleza humana, la oscuridad y la luz que hay en cada uno de nosotros, encuentran su mejor expresión en un grandioso Viggo Mortensen, en el que probablemente sea el mejor papel de su carrera.
Mortensen encarna magistralmente a un amoral y brutal asesino y a un honrado patriarca familiar, combinando estas dos facetas en un único ser: un hombre que debe enfrentarse a quién es realmente y que hará todo lo necesario para proteger a su familia.
WildStorm
El sello WildStorm estuvo operativo entre 1999 y 2010, aunque fue relanzado en 2017 por el escritor Warren Ellis para un proyecto especial. Ellis es, curiosamente, el creador de los cómics en los que se basan las dos adaptaciones más exitosas para la gran pantalla.
The League of Extraordinary Gentlemen (2003)
Publicada inicialmente bajo el sello America's Best Comics, The League of Extraordinary Gentlemen se planteó como una serie de historias escritas por Alan Moore e ilustradas por Kevin O’Neill sobre las aventuras de un grupo de personajes literarios que son reclutados por el Imperio británico para servir como agentes secretos y proteger al mundo de amenazas propias de las novelas de corte fantástico que fueron publicadas durante la época victoriana.
Dirigida por Stephen Norrington y distribuida por 20th Century Fox, estuvo protagonizada por Peta Wilson como Mina Harker, Sean Connery como Allan Quatermain, Jason Flemyng como Dr. Jekyll & Mr. Hyde y Naseeruddin Shah como el capitán Nemo.
A pesar de contar con un material con un extraordinario potencial cinematográfico, la película prefirió ignorarlo en su práctica totalidad y fue un sonado fracaso de taquilla, además de ser defenestrada por la crítica y los fans del cómic en que se basa.
Red (2010)
El primer contacto del subversivo guionista británico Warren Ellis con Hollywood fue a través de una obra menor como Red, una adaptación al cine del ultraviolento y existencialista cómic que realizó con el dibujante Cully Hammer.
Frank Moses (Bruce Willis) es un agente secreto retirado que, aburrido de su nueva vida, decide volver a la acción cuando alguien intenta asesinarlo, recuperando para ello a su viejo equipo. Helen Mirren, Morgan Freeman y John Malkovich dan vida a sus antiguos compañeros, dispuestos a poner toda la carne en el asador en su regreso a la acción.
Robert Schwentke es el encargado de dirigir esta comedia de acción coral, ingeniosa y ligera, en la que destacan todos los intérpretes, que se nota que lo están pasando en grande con sus personajes.
Red 2 (2013)
Alejándose aún más que la primera vez del oscuro cómic de Warren Ellis y abrazando totalmente la parodia autoconsciente, Dean Parisot dirige esta secuela que no está a la altura de su primera entrega pero que no deja de ser un entretenimiento decente, aunque también bastante olvidable.
La capacidad de la gran Helen Mirren para reírse de sí misma y la incorporación al reparto de Anthony Hopkins (que se limita a cobrar su cheque sin despeinarse) es lo mejor de esta insípida entrega que ni siquiera se puede considerar una adaptación en toda regla.
Bonus Track
Superman disfrutó de una serie de diecisiete cortometrajes animados en Technicolor a cargo de Paramount Pictures que suponen no sólo su primera aparición animada, sino su primera aparición cinematográfica. Por este motivo es por lo que hemos decidido incluirlos dentro de nuestra sección más especial.
Producidos originalmente por los estudios Fleischer (responsables de los 9 primeros cortos entre 1941 y 1942), pasaron posteriormente a manos de Famous Studios, que produjo ocho cortos más entre 1942 y 1943. Su gran calidad y generoso presupuesto hace de ellas uno de los productos más exitosos de la Edad de Oro de la animación estadounidense. También se encuentran situados en el puesto 33 dentro de la lista de los 50 mejores dibujos animados de todos los tiempos.
Superman The Mad Scientist (1941) fue el primero de estos cortometrajes animados estrenados en pantalla grande bajo el amparo de Paramount Pictures.
En el segundo corto animado de los estudios Fleischer, The Mechanical Monsters (1941), Clark Kent usa por primera vez una cabina de teléfonos para quitarse su ropa de calle y convertirse en Superman, algo que permanecería indisolublemente asociado al personaje desde entonces.
La influencia de este corto es tan grande que incluso Hayao Miyazaki lo referencia en su película Castle in the Sky (1986).
El cortometraje World of Tomorrow (2004) dirigido por Kerry Conran, muestra un ejército de robots atacando la ciudad de Nueva York. El director estrenaría posteriormente la película Sky Captain and the World of Tomorrow (2004), basado en su propio corto y con clara inspiración en los diseñadores Norman Bel Geddes y Hugh Ferriss, así como en el expresionismo alemán.
Para terminar, un importante dato que muchos desconocen: Ray Middleton fue el primero en vestir el traje de Superman, en una aparición en la World's Fair (Exposición Universal) en 1940.
Middleton (1907-1984) fue una de las celebridades invitadas a la New York World’s Fair, en 1940, participando como jurado del concurso Super Boy & Girl, un concurso promocionado en los cómics de Superman para elegir al "superchico" y a la "superchica" de América.
El día 3 de julio, la Feria, en colaboración con la cadena de tiendas Macy's, celebró el Superman Day, que coincidió con los festejos de conmemoración del Día de la Independencia de los EEUU.
Para sorpresa de todos los asistentes, el Hombre de Acero apareció presidiendo el desfile subido en una especie de pedestal, y más tarde saludando al público reunido. Era la primera vez que una persona aparecía públicamente interpretando al popular personaje de Superman desde su aparición en los cómics.
¡Hasta la próxima, DC-Maníacos!
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